13 septiembre, 2020

SI YO FUERA PRESIDENTE

Yo nunca he sentido que sirva como político, eso jamás me ha llamado la atención, y si lo fuera, no lograría ni siquiera obtener los votos para ser el presidente de la junta del edificio en el que vivo. Dejando eso claro, lo que voy a proponer aquí está basado en el hecho de tener al ser más inepto e inútil sobre la Tierra como presidente de Colombia.

En ese orden de ideas, empiezo diciendo que, si yo fuera presidente, no duraría ni dos días, pues con mis reformas y propuestas, me hacen un golpe de estado a horas de posesionarme. Pero ¿cuáles son esas propuestas? Empecemos:

      1-     Mi eslogan de campaña sería: dejar de jugar con la mota del ombligo y empezar a preocuparse por la telaraña que crece en los pies. Es decir, empecemos a solucionar los problemas de la Colombia profunda, la de las veredas, los litorales, las fronteras transnacionales. Lo primero sería recuperar el Pacífico, ir a Chocó, todo el departamento, no solo Quibdó, ir a Buenaventura, Tumaco, Caloto, etc., los lugares más olvidados por siglos, y los que más potencial tienen para crecer. Se protegería toda la selva chocoana, el Tapón del Darién, buscando potenciar el turismo ecológico y sustentable, educando a las poblaciones en el correcto manejo del territorio, en la adecuada atención al turista, en la implementación de protocolos de preservación independientes del gobierno de turno, en el que la población sepa defender lo más valioso que tienen. También reestructuraría los puertos de Buenaventura y Tumaco, los llevaría a duplicar su capacidad actual, mejorando su infraestructura y condicionando que las labores deben ser manejadas por personal de la región, nada de tener que esperar una decisión desde Bogotá. Para que esto sea posible, se necesitan vías y medios de transporte limpios. Se construirán autopistas y vías férreas para trenes eléctricos de alta velocidad, que comuniquen al Pacífico con las ciudades en las diferentes cordilleras. (Sí, suena a utopía, pero si no robaran tanto, seguro que se puede). 

      Luego del Pacífico seguiría la Amazonía y los llanos, recuperando el sector agrícola, la producción de alimentos para todo el país, y la conservación de la selva. Se controlarían efectivamente las fronteras, se llevaría las funciones del Estado a todas las veredas, ríos, quebradas, que sirven para el tránsito de grupos ilegales de un país a otro, con el fin de dar oportunidades reales de educación, salud y desarrollo a las comunidades más expuestas durante décadas al rigor de una guerra que ellos no pidieron. La triple frontera en Leticia, con Brasil y Perú, sería un foco de desarrollo y cooperación internacional, efectuando labores de conservación, reconocimiento, exploración, y aprovechamiento sostenible del pulmón verde más importante del mundo. 

     En los llanos, se haría igual en la frontera con Venezuela, pero adicionalmente, se controlaría el crecimiento desmedido de la ganadería, fuente de millones de hectáreas deforestadas anualmente. Para esta región, por su topografía, se aprovecharía para hacer un tren internacional que conecte a los dos países a través del territorio más común que tenemos, en el que compartimos cultura, historia y en el que empezaremos a compartir crecimiento económico. (Ya por esto, tendría una pistola en la cabeza, por parte de los que ven a Venezuela como el enemigo y no quieren tener relación alguna con ellos, olvidando que somos hermanos de una Gran Colombia). 

      Luego seguiría la frontera con Venezuela, pero al norte, en la Guajira, otro de los territorios más olvidados durante años, donde no solo no hay oportunidades, si no tampoco, desarrollo, o privilegios como los tenemos en las ciudades en lo alto de las cordilleras. Es aquí donde se debe reconocer la importancia de la población indígena en el conocimiento del territorio, en la cultura arraigada por siglos, y que debe ir acompañada de una limpia extracción de minerales y potencializar su atractivo turístico, al igual que en Chocó, a partir de la biodiversidad, de manera que en un futuro también se pueda acceder a estos lugares de manera fácil y controlada. 

      La región Caribe, antes de obtener algún beneficio por parte del Estado, debe ser limpiada de toda presencia de corrupción, de clanes económicos poderosos, que montan políticos a su conveniencia. Esto se hará trabajando directamente con las comunidades, no con los alcaldes y gobernadores, empoderando a la población para que tomen el control de sus territorios, de sus recursos. Esto no se logra si no hay una efectiva reforma al sistema judicial, pero ese es otro punto, por lo que no me voy a extender ahí. 

      Lo anterior para llegar al centro del país, a la región Andina, donde se concentra todo el poder administrativo y político, y que se ha beneficiado de las otras regiones en medio de una explotación y exceso, que no deja que el país crezca como se merece. Por eso, el desarrollo y aporte del país a esta región, será mínimo, dejando que cada ciudad viva en las mismas condiciones de oportunidades que históricamente han tenido las demás regiones. Esto lo que va a hacer, es que la gente busque llevar su conocimiento a los territorios apartados, liberando espacio en las ciudades, donde se pueda mejorar la calidad de vida para los que se queden, impulsando la construcción y adaptación de sistemas energéticos y de producción renovables, cuidando las fuentes hídricas, los páramos, bosques de niebla, recuperando de ser posible los nevados, todo a partir de una disminución considerable del uso de combustible fósil y de la contaminación atmosférica. Se implementará la reforestación urbana, los edificios públicos tendrán que adaptar jardines verticales al interior y exterior de sus fachadas, se recuperarán ríos y quebradas mediante la construcción de alamedas, bulevares y parques lineales, donde la vegetación endémica sea la constante, evitando caer en el paisajismo meramente estético, potenciando las mediciones de espacio público por habitante, y a su vez, disminuyendo los días de emergencia ambiental.

     2-  Todo eso suena muy bonito, y ¿cómo lo voy a hacer? ¿de dónde va a salir el dinero para llevar a cabo toda esa visión utópica? Lo primero es reducir el sueldo a todos los empleados públicos, empezando por el mismo presidente de la República. Se reglamentará que ningún funcionario público tenga como salario un monto superior a quince (15) salarios mínimos vigentes; que los servicios de transporte, telefonía, comunicaciones, y demás beneficios con los que cuenta actualmente, sean pagados por cada funcionario, nada de cuentas estatales ni empresariales; Que las sesiones del Congreso sean presenciales siempre, y a la primera falta injustificada, retiro del cargo y no puede ser reemplazado por alguien del mismo partido; cada funcionario público de alto rango, no podrá disponer de más de tres (3) asesores, y su equipo de trabajo será de máximo diez (10) personas. De esa manera evitamos la burocracia, el poner gente por pagar favores, y se obtendría un ahorro en el pago de nómina estatal de manera anual, que permitiría empezar a desarrollar parte de los proyectos del punto 1. Pero esto no es suficiente. Tenemos que conseguir más recursos. Y ¿quiénes tienen más recursos? Pues los bancos y los empresarios. A ellos les cobraremos más impuestos, nada de exenciones por ser buenos samaritanos, y se multará a quien decida reducir empleos con el fin de pagar menos impuestos. La reforma tributaria afectará al que más tiene, no al que no tiene nada, como ahora. También se cobrarán impuestos a las iglesias, pues este es un Estado laico, y no se debe tener preferencia por ningún tipo de religión. Impuesto predial, impuesto al patrimonio, impuesto de renta. Adicionalmente, si por falta de pago, una comunidad religiosa, deja de funcionar (algo poco probable) sus edificaciones serán equipadas como centros culturales, donde se estudie la historia arquitectónica, arqueológica, política y cultura de cada territorio.

Para impulsar la economía, el salario mínimo tendrá un incremento inicial, llegando a un valor que permita a una familia tener lo mínimo para subsistir, como debe ser, no como el actual que es una miseria. Luego de este incremento, el reajuste anual será igual a la inflación generada. Nada de reuniones infructuosas entre gremios y sindicatos. De esta manera se garantiza que el consumo se incremente en los estratos más bajos, obligando a la industria a ser más productivos, lo que conlleva a contratar más trabajadores y ampliar sus plantas, lo que a su vez hace que obtengan mayores ingresos, que a su vez se convierten en una mayor recaudación de impuestos de industria y comercio.

Como se van a mejorar las vías y las infraestructuras de puertos, y adicionalmente, nuestras industrias van a tener que producir más y mejores productos, la importación va a regularse y la exportación va a aumentarse, lo que va a permitir garantizar mayores recursos para la consecución de objetivos del punto 1.

Por otro lado, los bancos, vamos a dejar de cobrar el 4 x mil, cuotas de manejo y retiro, transacciones nacionales, giros y demás cobros abusivos a personas que tengan cuentas en las que mensualmente tengan ingresos por debajo de cinco (5) salarios mínimos. El salario es para los trabajadores, no para los bancos. Estos podrán obtener ganancias únicamente de los grandes capitales y de cuentas corrientes, además de lo que inviertan en la Bolsa de Valores. Si un banco, al finalizar cada año, obtiene ganancias superiores al crecimiento porcentual del PIB, ese porcentaje extra será reembolsado a los clientes de menores ingresos que tengan en su base de datos, como compensación por todos estos años de abusos y mal servicio.

Para terminar este punto, de generación y recolección de recursos económicos, vamos a legalizar la producción y comercialización de drogas alucinógenas, viendo esto como un problema de salud pública y no de orden público (si todavía no me han matado los banqueros, con esto me mata Estados Unidos). Bajo esta premisa, las ganancias obtenidas por la venta controlada de alucinógenos se usarán para la construcción y mantenimiento de centros de salud para la recuperación de adictos, de espacios públicos de uso controlado de drogas, trabajo social con las familias de las personas afectadas por el abuso de dichas sustancias, recuperación de cultivos y preparación de laboratorios exclusivos para la elaboración controlada de esas sustancias. Estas se venderán bajo el mismo sistema de medicamento de control, y quienes sean consumidores no serán atacados ni discriminados por miembros de la fuerza pública, siempre y cuando se comprometan a realizar su uso en los lugares adaptados para ello, a ver si de una vez por todas, dejamos los parques infantiles para los niños, los centros deportivos limpios y la razón de existir de los grupos de microtráfico sea controlada por la autoridad. Esto seguramente generará muchos inconvenientes mientras se regula, pero en otros países se ha demostrado que un control por parte del Estado de esta problemática, es la mejor solución para todos.

   3- Todo lo anterior debe ir regulado por un sistema de justicia efectivo, ágil, y que genere nuevamente confianza en las instituciones del Estado por parte de la ciudadanía. Para esto propongo que las cárceles tengan un acompañamiento de carácter social y psicológico, con la misma cantidad de personal que tienen para garantizar la seguridad dentro de las mismas. Adicionalmente, a las personas que se hayan visto involucradas en casos de narcotráfico inferior a 10 kilos, o las llamadas “mulas”, se les dará un indulto por parte de la presidencia, con el previo compromiso de no intentar de nuevo sacar de manera ilegal mercancía, que ya será legal dentro del país. En caso de reincidir y ser capturado, se le aplicará un (1) año de prisión por cada kilo que lleve, sin oportunidad a rebaja de penas por buen comportamiento.

Con ese indulto se resuelve parte del hacinamiento de los centros de reclusión, pero no el problema total. Los delitos menores, serán tratados con un trabajo social y de re-educación funcional, para que, al salir, la persona sea alguien útil. Los delitos atroces, no serán impugnados ni indultados. Los delitos políticos, y los políticos delincuentes, serán encerrados de por vida, a cadena perpetua, y solamente podrán salir de su reclusorio en un carro fúnebre directo al lugar de sepultura. Cero tolerancia al corrupto, al genocida, al paramilitar, al guerrillero (que no haya cumplido con lo acordado y siga delinquiendo y/o justificando su accionar pasado).

Todo eso muy bonito, pero ¿quién se va a encargar de impartir justicia si los juzgados están atorados en procesos de años? Desafortunadamente eso no se soluciona de la noche a la mañana; primero deberá digitalizarse todos los folios de cada proceso, siguiendo parámetros del sistema de gestión de calidad, en cada ente de control, Fiscalía, Procuraduría, Contraloría, etc., y estos deberán estar coordinados entre ellos para que la información sea clara al realizar cualquier consulta de cualquier caso. Los directores de los entes de control, no serán ternados por el Gobierno, si no que serán escogidos por convocatoria pública a través de la plataforma del Centro Nacional del Servicio Civil, CNSC, con el fin de garantizar un proceso de méritos y no de apoyos. Se espera que las personas que resulten a cargo de dichos entes, no tengan compromiso alguno con partidos o con clanes económicos que le resten independencia a su labor.

   4- Estas ideas tienen que ir acompañado de un proceso de re-estructuración, educación y profesionalización de la fuerza pública, enfocada en derechos humanos, sociología, antropología y psicología, en el que cada miembro, de cada fuerza, de cada rango, deberá aprobar satisfactoriamente, y del que se deberá actualizar anualmente para poder continuar ejerciendo su labor. De esta manera esperamos erradicar los abusos, las desapariciones, los malos protocolos. Además, se podrá contar con el acompañamiento de las diferentes fuerzas de control, para todo el trabajo de gestión social con las comunidades más apartadas, buscando generar nuevamente confianza en las instituciones, y que estas estén para proteger y no para agredir. Por cierto, el ESMAD será desmontado en su totalidad, y las tanquetas convertidas en centros culturales móviles, que se desplazarán a las comunidades más alejadas a llevar la presencia efectiva del Estado, y por “presencia efectiva” me refiero a educación, salud, créditos, emprendimiento, tecnología, etc.

     5-  Para finalizar, el punto más importante de todos, el de la educación. Es cierto que no existen las construcciones adecuadas para este fin en los municipios y veredas más alejadas del país, y también que estas han sido siempre las de minorías étnicas y culturales, por lo que son las que se encuentran en un mayor nivel de atraso tecnológico. Por esta razón, se va a impulsar la enseñanza de lenguas nativas de las comunidades indígenas en los colegios de las zonas urbanas, principalmente de las grandes ciudades, siguiendo además con la aplicación de estas en cursos de carreras profesionales catalogadas como humanistas. Esto será muy útil al momento de implementar el primer punto de este plan de gobierno, pues se podrán desplazar desde las ciudades hacia las comunidades, profesionales y tecnólogos capaces de entender y hacerse entender, logrando una mayor comunicación y una mejor labor social. Adicionalmente, se implementarán las clases de ciencias básicas en idioma inglés, algo que está planteado desde hace muchos años pero que no ha podido llevarse a cabo por falta de oportunidades para que los docentes puedan prepararse en la enseñanza desde un segundo idioma.

También se prohibirán en los colegios públicos las clases de religión, ya que esto es una decisión de cada ser y no debe ser impuesta como dogma a partir de la educación pública. Los colegios privados que deseen impartir esta asignatura, deberán incluir información clara y objetiva de todas las religiones del mundo, no solo la católica como ha sido costumbre, si no también del judaísmo, hinduismo, budismo, islamismo, etc., con el fin de educar desde la empatía y no desde el sectarismo. Estas, además, deberán incluir en sus enseñanzas, la participación histórica en los eventos mundiales de cada una de ellas, no quedarse solo en la doctrina de cada una, si no en la implicación de las decisiones que sus dirigentes han tenido en los eventos que hacen parte de la historia de la humanidad.

De igual manera se deberá incluir educación de género desde los primeros años de primaria, acompañado de educación sexual y reproductiva, de manera objetiva e imparcial, y alejada de cualquier dogma religioso. Se verificará frecuentemente por parte de PROFAMILIA que se garanticen los derechos sexuales y reproductivos de los estudiantes.

 

Como ven, las utopías son muy bonitas, pero lograr llevarlas a cabo, es imposible, y menos en países como este. Esto es solo un borrador de un plan básico de gobierno, con el que sueño, que me gustaría poder vivir antes de morir, pero eso ya es pedir demasiado. Seguramente tiene varias equivocaciones y supuestos; claro, no soy político, economista, profesor, sociólogo, etc., además que es susceptible a cambios en su ejecución y programación. Lo que sí es cierto, es que algo así, generaría más inconformidad entre la gente, y es ese miedo al cambio lo que no deja que este país prospere.

 

 

SI EL PAÍS FUERA UN COLEGIO

Supongamos que lo que está pasando actualmente en Colombia, sucediera a una escala más pequeña y fácil de digerir para todos.

En este caso, Colombia es un colegio cualquiera, en un municipio cualquiera. Resulta que, en este colegio, los alumnos de grado 11 (policía y ejército), con el permiso del rector (Duque), se la han pasado haciendo Bullying a los demás alumnos de cursos inferiores.

Con la pandemia y su cuarentena, el servicio de alimentación que se les daba a los estudiantes nunca llegó, porque el rector, en medio de su infinita bondad (sarcasmo) y siguiendo las directrices de la secretaría de educación del municipio (Uribe) decide coger esos recursos para dotar de implementos de última tecnología a los estudiantes de 11, con el fin de que puedan terminar sus estudios tranquilamente, mientras siguen molestando a los menores.

Eso les permitió violentar a los estudiantes y profesores incluso en las clases virtuales, en las que hackeaban las plataformas para meterse y burlarse de todos.

Cuando la cuarentena se acabó, y los niños pudieron volver a salir, los de 11 empezaron a violentar y agredir físicamente a los niños que se encontraban en la calle.

Un día, uno de esos niños, de 5to grado, les plantó cara a dos que lo estaban molestando, y como no les gustó, se lo llevaron para la casa de uno de ellos y lo golpearon casi a punto de morir (en este caso el abogado sí murió).

La madre de este niño, empezó a exigirle al rector que controlara a los de 11, que ya se estaban pasando, y fue acompañada de los hermanitos del niño golpeado. Los de 11, sabiendo que no les iban a hacer nada, pues golpearon a la señora y a los hermanitos.

En medio de toda esta situación, los alumnos de los otros cursos también empezaron a protestar y a reclamarle al rector que hiciera algo, pero este no entendía y se hacía el que no era con él la cosa.

Entonces los de 11, para justificar sus agresiones, infiltran en los manifestantes a algunos compañeros con el fin de enardecer a la multitud, incluso empezando a dañar las instalaciones del colegio, mientras que los de 11, seguían atacando a los más vulnerables.

Unos padres, se enojaron porque estaban acabando con el colegio, sin importarles los niños que estaban siendo maltratados por los mayores.

La coordinadora de disciplina (Claudia López) dijo que los de 11 estaba desatados y que ni a ella le hacían caso, por lo que habló directamente con el rector, quien le dijo que sí, que bueno, que iban a investigar, pero eso lo hizo solamente para quitarse a la coordinadora de encima, que no lo estaba dejando ver el partido que estaban dando.

¿Será que así sí entienden o tampoco?